ESPIRITUALIDAD

Eucarística

El misterio de Cristo: ilumina nuestra vida, afianza nuestra fe, sostiene nuestra esperanza, motiva nuestro amor, penetra nuestro ser y lo transforma, por eso: lo acogemos en su palabra lo celebramos en la liturgia, nos alimentamos con su eucaristía y nos ofrecemos a él por expiación de los pecados personales y del mundo entero.

MARIANA

María de Guadalupe siendo el prototipo de discípulo y apóstol es el modelo perfecto de nuestra espiritualidad. La que imitar en su “Sí” sostenido de amor y fidelidad a los planes de Dios, en una actitud de disponibilidad total.